EL NIETO DE CUPIDO CAPITULO 5
Hola gente hermosa como les va? primero que nada les queremos decaer muuyy feliz sábado. hoy le toca al quinto capitulo de EL NIETO DE CUPIDO, les queremos contar que estamos muuuyyy felices por su aceptación tanto por este libro como por los de la saga y esperamos que nos sigan apoyando. Bueno no los molestamos mas y a leer.
CAPÍTULO 5
— ¡SÍ!
— Quise gritar, pero en cambio dije — Amigo vas de 0 a 100 en 3 segundos, esto
no es Indianápolis.
—
¿Indianápolis? ¿Así se llama tu hombre?
—No —
dije y me di una patada mental en mi sexy trasero. Suspiré antes de tratar de
explicar — Es un lugar en casa donde
hacen carreras de carros. Es muy
estimulante.
—Para
mí no se oye entretenido.
—Créeme,
lo es —reí ante mi comentario.
—Entonces,
¿subimos? — preguntó nuevamente Theron.
—No —
contesté suavemente — No soy de los que corren con el primero, Theron. No es que no quiera arrancarte cada pieza de
ropa que usas y besar y lamer todo tu cuerpo; pero creo que debemos conocernos
mejor antes de saltar uno sobre el otro.
— ¿No
es para eso para lo que viniste aquí? — preguntó Theron con una mirada extraña
en su rostro.
Entonces
un vacío se abrió en mi estómago. ¿Acaso
creería él que por estar aquí era yo una puta?
La desilusión corrió por mí ser, haciéndome creer que nunca encontraría
a alguien que viera más allá de la ropa y la piel; y entendiera que mi alma
buscaba a su gemela.
—Aparentemente
equivocándome otra vez — dije y me levanté.
— ¿A
dónde vas? — cuestionó Theron.
—A
casa.
— ¿Por
qué? Pensé que nos entendíamos bien.
—No
tan bien como tú quieres. No soy una
puta — exploté.
—Nunca
dije que lo fueras. Sólo me intrigaba
que hacías en una casa de citas.
—Ya
te lo dije, me trajo mi abuelo.
Theron
me miró por unos segundos de manera muy intensa. Luego una perezosa sonrisa apareció en sus
carnosos labios, y una mirada de lujuria brilló en sus ojos. Creo que la iluminación con velas estaba
haciéndome una mala pasada, porque juraría que su piel brillo un poco.
Él
puso sus brazos sobre la mesa, y se recostó por encima de ellos mirándome más
de cerca. Entonces estiró su mano y comenzó a pasar un dedo sobre mis
nudillos. No sé si era la
sobreexcitación o alguna otra cosa; pero
sentía la caricia directamente en mis testículos.
—Nunca
antes había tenido que conquistar a un hombre.
Pero, me gustas Max. Así que
conozcámonos.
Por
un segundo pensé que estaba alucinando.
Ese arrebatador hombre estaba de acuerdo conmigo y quería hacer las
cosas a mi modo. Sonreí emocionado.
—Gracias
— contesté.
—Por
nada. Entonces…. ¿Cómo nos conocemos?
—Cuéntame
algo de ti.
—
¿Qué quieres saber?
En
los próximos minutos Theron me contó que sus padres habían muerto cuando él
tenía 10 años, que a juzgar por su apariencia, eso había pasado hace unos 10 a
15 años. También me contó que su abuelo
era un sobreprotector neurótico que
pretendía tenerlo bajo vigilancia constante.
Claro que él era un maestro en el arte de la escapatoria y raras veces
era descubierto. También me relató que
vivían en un área remota, lejos de la familia, ya que su abuelo era tan
paranoico que pensaba que todos querían hacerle daño.
— ¿Quién
era el hombre que nos interrumpió hace un rato?
—El
hermano de mi abuelo.
—Wow. Se ve joven para ser el hermano de tu abuelo
— dije yo maravillado al ver los
secretos de juventud de la Atlántida.
Theron
contrajo el rostro como si hubiera hablado de más.
—Es
adicto a las hojas y aceite de olivo.
—Vas
a tener que explicarme eso — exclamé con una risita.
—Tomas
un poco de aceite de olivo y le agregas algunas hojas machacadas; a
continuación, agregas unas gotas de azafrán y te colocas la composta en la cara
tres veces al día. — me explicó con una sonrisa que me ocasionó una ligera
incomodidad en los pantalones.
—Creo
que conseguiré hojas de olivo cuando llegue a mi casa — comenté a modo de broma.
—Te
puedo mostrar donde están los mejores olivos de la isla. Si no, podemos ir a Creta, hay un valle muy
fructífero allí.
—Lo
tendré en cuenta.
Cuando
acabamos de hablar sobre los familiares de Theron, comenzamos a platicar de
cosas tontas. Para gran satisfacción mía, Theron me relató cómo Poseidón
paseaba por el pueblo enamorando jovencitas, y a la mañana siguiente aparecían
en sus lechos cubiertas de estrellas de mar; eso era gracioso. Yo en cambió le conté sobre cómo había sido
crecer con mis abuelos. Claro que nunca
mencioné que mi abuelo era un hombre que aparentaba 21 años. Hablamos también de cómo me sentí al saber
que me gustaban los hombres y no las mujeres, y de la aceptación de mi
abuelo.
—A mi
abuelo nunca le preocupó con quien durmiera
— me dijo él — Solamente me advirtió de no embarazarlos — concluyó
levantando las cejas.
Me
reí como idiota con el comentario. Ya sé
que estaba en tierra de dioses, pero nunca había oído hablar de algún hombre
embarazado.
Hablar
con Theron era sumamente fácil, aun cuando tenía que medir mis palabras para que
no fuera a mencionar cosas indebidas, como el Internet o mi iPod. Miré hacia la calle y observé que estaba
oscureciendo. Tenía que regresar a casa
y ver si Keith seguía con vida; no es
que me preocupara mucho, pero un cadáver en mi casa, aunque su muerte fuera por
placer, sería una mancha negra en mi expediente. Peor aún si ese expediente es, como en mi
caso, el de un agente de informática del FBI.
Oye no pongas esa mirada en tu cara, nunca dije que fuese tonto, sólo
inexperto.
—Creo
que es hora de irme — dije mirando instintivamente mi muñeca en busca de mi
reloj. ¡Duh! aún no lo inventaban — Mi abuelo debe estar preocupado.
—Sí. ¿Te veré de nuevo?
—Tenlo
por seguro. — solté levantándome, a lo que él me imitó.
—Gracias
— sonrió — Una semana a partir de hoy.
—Sí. — de alguna manera lograría que el abuelo me
trajera nuevamente.
Theron
me tomó por la cadera y me pegó a él. Inmediatamente pude sentir su duro pene
junto al mío, tan caliente como el sol.
Por un instante me planteé la posibilidad de subir al tercer piso,
olvidarme de todos mis miedos y reparos; y dejar que ese hombre me marcara como
suyo.
—Para
que me recuerdes — dijo a mi oído.
Entonces
lava líquida corrió por mis venas al sentir sus labios devorando mi boca, en un
beso salvaje y exigente. Usando sus
dientes, mordió mis labios provocando una mezcla exquisita entre pasión y
dolor. Sus grandes manos ahuecaron mis nalgas, apretándolas duramente mientras
nuestros penes se frotaban entre sí.
No
estoy seguro de cuanto duró el beso, ni si Theron sólo me besaba para que no
gritara de felicidad. Pero soy consiente del momento exacto en que un rayo
cruzó mi ser y la humedad llenó mis pantalones.
Theron
dejó mis labios y clavó sus dientes en mi hombro; no lo suficientemente fuerte como para romper
mi piel, pero si lo suficiente para hacerme acabar una vez más. Y maldito sea
si no fue el mejor orgasmo que había tenido.
Theron
se entretuvo lamiendo la marca por unos minutos y sosteniendo mi cuerpo, ya que
me había convertido en una masa gelatinosa por sus caricias. Me reí para mis adentros al pensar en la
gelatina. El abuelo siempre me daba
gelatina de niño, no sé de donde la sacaba pero era deliciosa y fragante. Theron apretó mi culo una vez más
devolviéndome a mi realidad justo a tiempo para sentir más humedad en mi
ropa. Esta vez, de Theron.
—Ya
quiero que regreses y ni siquiera te has ido.
—Lo
mismo digo.
Me
dio un ligero beso y me dejó caminar fuera de sus brazos. No estoy seguro si mis pies tocaban el suelo,
pues me sentía flotar mientras me encaminaba a la salida. Creo que más que caminar me tambaleaba de un
lado para otro en busca de la salida. Con una sonrisa idiota en mis labios salí
del lugar.
El
fresco aire salado tocó mi cuerpo, recordándome el semen fresco que empezaba
a secarse en mis pantalones. No es que fuera malo, sólo que sería muy
incómodo tener los pantalones llenos de semen seco todo el camino a casa. Con
el propósito de limpiar mi pequeño desastre, conjuré una vez más mis poderes y
chasqué mis dedos deseando tener mis pantalones limpios, para mi sorpresa y
buena suerte sucedió. Quise saltar de
alegría, pero en serio no tenía nada de energía. Mi mundo había temblado con el mejor beso de
mi vida.
Mientras
caminaba puede ver al abuelo jugando dardos en la acera del frente. Digo dardos, pero en realidad estaban
lanzando cuchillos. Me recosté en uno de
los pilares a ver a mi abuelo divertirse.
Pero como el buen dios que era, fue consiente del momento en que llegué.
El
abuelo al verme; tomó sus ganancias y un morral, que no había tenido hace unos
momentos, se despidió de sus amigos y camino hacia mí. Entonces vi que se acercó a un niño de unos
10 años de edad para darle el dinero ganado de las apuestas. El niño le sonrió mientras el abuelo hablaba,
tomó el dinero y se fue.
El
chico tenía un aire familiar. Me
pregunté si era hijo del abuelo, y por tanto mi tío. El abuelo lo había dicho en un sinfín de
ocasiones, él había sido muy promiscuo.
— ¿Hijo
tuyo? — no puede evitar preguntarle.
—No —
contestó el con una sonrisa — es mi hermanito
— ¿Tu
hermanito? — ¿Cuántas sorpresas puede manejar mi corazón?
—Sí. — el abuelo suspiró — Mi padre tiene muchos hijos
con humanas que ni cuida ni reconoce.
Drake
es uno de ellos.
—Y tú
lo cuidas — dije más como declaración que como pregunta.
—No
puedo ver a un niño sufrir. — comentó el abuelo — Su madre era una niña cuando
lo tuvo. Es un buen chico, será un gran
hombre.
—Me
gustaría conocerlo — le dije a mi abuelo.
—En
tu próxima visita — me contestó riéndose y pasando su brazo sobre mis hombros.
—Hablando
de eso… ¿me puedes traer en una semana?
—Sí —
el abuelo me miró expectante, esperando que yo hablara.
—Conocí
a alguien —musité.
— ¿Y
cómo es él? — preguntó — No hueles a sexo.
Yo lo
miré y me reí. Levanté mi mano y moví
mis dedos como si fuera a tronarlos pero sin hacerlo
—Así
que ya estamos controlando mejor los poderes.
—Un
poco, sí.
—Me
alegro mucho. ¿Qué más me cuentas de ese
alguien?
Pase
los siguientes 10 minutos hablando al abuelo sobre Theron. De todas las cosas que me hizo sentir y de
cómo su infancia y la mía fueron parecidas.
Fui consiente que salimos de la cuidad y caminamos a oscuras hasta
llegar a un acantilado; vi una hermosa casita a orillas del risco. A la derecha había un pequeño campo sembrado
con lo básico. También había un poco más
allá un gran árbol de olivo. Imaginé
perfectamente un columpio entre sus ramas.
También vi un poco más alejado de la casa un establo, o al menos yo
imaginé que era un establo.
— ¿Quién
vive aquí?
—Yo
cuando estoy en la Atlántida. Pero ahora
será tuya para ti y ese alguien a quien conociste.
— ¿Por
qué?
—Imagino
que quieres privacidad. La casa de
Bernarda es un buen sitio para conocer gente pero no para entablar una
relación. Y tu cariño, no eres de los
que tienen aventuras de una noche.
Olvidaba
que, veces estar con mi abuelo, era ser de cristal. El veía a través de mí como si yo estuviera
hecho de ese material.
—Entremos
— señaló el abuelo el interior.
El
abuelo cerró la puerta tras de mí, de inmediato el fogón y algunas lámparas se
encendieron como si estas tuvieran un interruptor. No había necesidad de ser un genio para saber
que había sido el abuelo. La casa era
espaciosa; las paredes eran de piedra y el techo de paja. En el interior, había
una sala amplia con una mesa y cuatro sillas, se encontraban también dos sillas
altas frente al hogar. A la derecha
estaba el área de cocina; a la izquierda había una cortina dividiendo, lo que
yo asumí, sería el área de dormitorio. Y
así era, en la habitación se podían encontrar una gran cama de madera con
pieles y almohadones de pluma.
Por
esa misma área de la casa había una gran bañera de madera y un sistema de
tuberías. Por lo que pude apreciar, esta
era una ducha y una fuente para llenar la bañera. Prácticamente la habitación era una pequeña
casa a escala. Las ventanas del
dormitorio estaban ubicadas al acantilado lo que daría una maravillosa vista
del atardecer. En el área de la cocina
había una puerta que daba a una pequeña terraza con banquetas y algunas macetas
sembradas con geranios y tomates.
Extraña combinación, si se me permite decirlo.
—Ven
aquí — me llamó el abuelo desde la cocina.
Una
vez dentro de la casa, el abuelo sacó una bella vajilla de barro de un anaquel;
para a continuación, quitar una piedra suelta de la pared, la cual revelo un escondite. Extrajo una caja de madera negra y abrió la
caja para revelar su contenido. Dentro de la caja podían observarse una docena
de frascos de vidrio negro, parecidos como el que tomé al llegar a la
Atlántida.
—Siempre
que llegues aquí, toma uno de estos.
Sabes muy bien la importancia de ello.
—Si
abuelo — contesté obediente.
—Si
ves que quedan dos me lo informas y traeré más.
Medea los hace para mí.
— ¿Quién
es Medea?
—Una hechicera
amiga mía.
— Una
pregunta ¿Cómo puedo llegar aquí? Quiero
decir, no preste mucha atención al camino.
—Sabes
el camino. Tu mente lo recordará. Y antes que lo preguntes te mostraré como
aparcar en Atlántida en unos días. Pero
te suplico, Max, que no vengas solo hasta que no tengas mejor control de tus
poderes.
—Lo
prometo abuelo.
El
abuelo me sonrió satisfecho con mis palabras.
Luego se acercó y puso un dulce beso en mi mejilla.
—Estoy
orgulloso de ti cariño. Te amo
—Y yo
a ti abuelo.
— ¿Listo
para volver a casa?
—Sí. Con suerte y Keith ya se fue.
—Lo
dudo — dijo el con una sonrisita.
Antes
de decir nada, sentí un ligero cambio en el aire antes de aparecer en la sala
de mi apartamento. Y fue grotesco. No sólo Keith gritaba como un poseído pidiendo
más y más, sino que toda su ropa estaba esparcida por mi sala. Maldita sea, amaba ese sofá, y ahora iba a
tener que cambiarlo; si las manchas blancuzcas que vi eran lo que creía.
El
abuelo se rió disimuladamente. Era obvio
que Príapo se tomó en serio su trabajo.
—Es
asqueroso — gruñí asqueado.
—Es
un castigo.
—Yo
nunca disfruté mis castigos tanto como los está disfrutando él.
—Créeme
— dijo el abuelo riendo — Mañana será un suplicio para él. Por no hablar del resto de su vida cuando
correrse no sea placentero.
— ¿Hablabas
en serio?
—Sí.
— ¿No
crees que eso es demasiado cruel?
— ¿Acaso
lo que él te hizo a ti no fue cruel?
—Sí. Pero yo ya tengo quien me consuele — dije
pensando en Theron — Además yo no podría vivir feliz sabiendo que hay alguien
sufriendo por mi culpa.
—Tú y
tu corazón noble — susurró el abuelo negando con la cabeza — Esta bien. Dejémoslo en que sepa que tuvo al mejor
amante de su vida, y que lo perdió por idiota.
—Sí —
sonreí ante la respuesta de mi abuelo.
Repentinamente,
el ruido de algo cayendo atrajo la atención de Max y Eros. En el suelo había un pergamino.
—Creo
que llegó tu primera misión — comentó el abuelo tomando el pergamino.
—Déjame
ver — contesté arrebatándole dicho papel de entre sus manos.
Efectivamente,
era mi primera misión. Evan Cooper y
Shane Carmichael eran los nombres, junto a estos aparecía la dirección de cada
uno. Tenía que hacer algo de
investigación antes de emprender mi trabajo.
Justo en ese momento Keith gritó a pleno pulmón
—¡Max!
Párteme a la mitad ¡Oh Max! eres mi macho
Arrugué
el rostro con asco y vergüenza. Mis
vecinos pensarían que era un depravado por los gritos que pegaba ese
hombre. Lo más increíble de todo, era
que yo no había tenido sexo en esa cama y mi traicionero ex prospecto de novio
la estrenó por mí.
—Necesitaré
muebles nuevos y terapia.
—De
los muebles se encarga Príapo. La
terapia no la necesitarás. Vas a
trabajar tanto en estos días, que
te olvidaras de este imbécil fácilmente.
— ¿Por
qué tengo yo que pagar por sus muebles? — se quejó Príapo desde la puerta. Lo increíble de todo es que el hombre seguía
tan erecto como cuando lo vi la primera vez.
— ¿Qué
paso con Keith? — pregunté.
—Se
desmayó. Eso pasa cuando tienes sexo
tantas horas.
— ¿Cuánto
tiempo estuvimos fuera? — dirigí la pregunta al abuelo.
—Alrededor
de unas 7 horas.
—Exacto
— señaló Príapo — Fueron 7 horas y media,
gracias por el regalo. Su cereza
jamás será la misma. — Príapo sonrió — La tuya por otro lado sigue
intacta. El cabrón quería montarme —
susurró indignado
—Como
si nunca hubieras estado abajo, hermanito — se burló mi abuelo.
—Si
lo he estado, pero eso es un premio para alguien que me haya hecho gozar
mucho. No para un imbécil que me beso
pensando en otro. Fui el dominante pero
estoy seguro, le encantó. Mañana
caminará gracioso, y posiblemente toda la semana camine igual. Pero no se olvidará de ti.
—Él
no quiere que sufra — indicó el abuelo con fastidio, como si no aceptara mi
decisión de no hacer a Keith infeliz el resto de su vida.
— ¿Por
qué no? El cabrón venía con la intención
de cogerte y comprometerte. Sólo quería tomar una tajada de ti.
—Pero
yo no quiero vivir con el peso de su infelicidad en mi conciencia. Si va a ser infeliz, que no sea por mi culpa.
—Es
por su culpa. — dijo Príapo mirándome de
manera diferente — Pero ahora le quito el castigo. — soltó antes de desaparecer
por la puerta.
El
abuelo me abrazó, al igual que siempre que estaba orgulloso de mí.
—Te
ganaste el respeto de mi hermano.
Yo no
lo entendí. La verdad no lo hacía por
Keith, el sólo imaginarlo masturbándose con mi recuerdo me daban arcadas.
—Listo
— dijo Príapo — Le quité el castigo.
Sólo te recordará por unos seis meses; pero el caminar graciosos le
durará unas semanas — terminó con una sonrisa diabólica— Una vez más, gracias
por el regalo. Y no dudes en enviarme a
cualquier culito dulce que te moleste.
Príapo
desapareció de mi sala. Para gran felicidad mía, vi como mi sofá quedaba limpio
de sustancias biológicas humanas. Ahora con eso fuera de mi mente, regresé mi
atención al pergamino en mi mano
— ¿Por
dónde empiezo con esto? — señalé el pergamino con la cabeza.
—Tienes
que averiguar que hay en común entre esos dos para que se reúnan en un mismo
sitio y flecharlos.
—Pan
comido — dije mientras me encaminaba a mi estudio donde mis juguetes me
esperaban — hackeemos algunas bases de datos. — susurré alzando las cejas.
A
veces era bueno trabajar para el gobierno.
Pero incluso era mejor ser el nieto de Cupido.
jajaja... como me he reido, siempre ese humor sexual tan picante que me hace reir
ResponderBorrarFeliz de que Max haya relevado el castigo de Priapo al idiota: Keith*
¿Que demonios le hizo Theron a Max que se corrió así, como chasquar los dedos?
Su primera misión y es nefasto con el arco y flecha
________________________
Feliz y contento de que publiquen la historia,
Un gran beso chicas!
Buenisimo, que bueno Max queriendo que Keith no sufra demasiado... y Theron que pasará con estos dos? y haber que pasa con la primera misión! aun se ha de equivocar y ha de flechar a quien no es, jeje gracias por el capi y esperando el próximo, besos
ResponderBorrarJaajaja...chicas me mato este capi , buenisimoooo ...cada vez me gusta más Max ...les mando un besote y espero el proximo
ResponderBorrarHolaaa
ResponderBorrarMuchas gracias por el capi, buen fin de semana :D
que bueno , asi que en realidad era el nieto ( theron ) pero que bueno es max no quiere que keith sufra mucho pero bueno max.... has bien tu primer trabajo flechalos
ResponderBorrargracias chicas por traenos ese lindo capitulo estare esperando ansiosa el proximo b
llegué a la historia por el final y al final empece la historia como se debía....principio..jojo...entretenida...por que me leí los 5 capitulos de una...y la dinamica no cae...te mantiene enganchada hasta no escuchar a tu hijo...jojojojooo....gracias por compartirla...bsss..
ResponderBorrarHola jaja cada vez que acabo de leer un capitulo me quedo con ganas das gracias por el capi esperando por más gracias
ResponderBorrarHola
ResponderBorrarMuchas gracias por el nuevo capitulo ,
Buen fin de semana
OMG!!!!!!!!!!!!! no tengo palabras esto esta cada vez mejor y mejor muchas gracias x el capitulo sin duda alguna la historia es sublime ñam ñam jajaja
ResponderBorrarAhh me encanta! ! Excelente historia. Jaja sólo me quedo una duda existencial ¿ que mierda es theron? e.e necesito saberlo
ResponderBorrarbueno y lo que le sigue, me ha encantado, theron, max, eros los adoro, sexi el beso guau, me encanta priapo es geeeeenial, muchas muchas gracias por compartir, besos mil
ResponderBorrarGracias por el nuevo capitulo ha estado fabuloso y me he quedado con ganas de mas, estoy deseando leer el siguiente, besos
ResponderBorrarme ha encantado porfavor castigame con priapo que h sido mala jjajaj gracias por otro magnifico capitulo un abrazo
ResponderBorrarHola y muchas gracias por el capitulo lo esperaba con muchas ganas.Besosss
ResponderBorrarEste capitulo ha estado genial, cada vez que los termino de leer espero con ansias el que sigue....muy, muy bueno, muchas gracias por compartir algo tan genial como esto.
ResponderBorrarHola gracias por el capitulo es magnífico, ahora a esperar el próximo. Gracias
ResponderBorrarDIOS!!!! CADA VEZ ME GUSTA MAS ESTA HSTORIA. REI A MARES CON EL CASTIGO PARA EL EX TRAIDOR. EROS Y PRIAPO JUNTOS SON DE TEMER. YA ANSIO EL SIGUIENTE CAPITULO
ResponderBorrarHola!!!, la verdad no se como hacer para aguantar hasta el siguiente capitulo!.... es que se pone muy buena la cosa en especial con que el chico no resultó hacker... umm me encantan los chicos listos... aunque podría ser un poco mas malicioso para que disfrutara más sus dotes e inteligencia jejejeje
ResponderBorrarMuchisimas gracias por este nuevo capitulo. No habia tenido oportunidad de leerlo hasta ahora >///< y de verdad me encanta
ResponderBorrarestoy ansiosa por saber que sigue!
ResponderBorrarme gusta me gusta!!! sigo leyendo...<3
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