EL NIETO DE CUPIDO CAPITULO 3
Bueno gente hermosa, como ya sabemos no pudimos llegar a la meta, pero estamos mas que felices con sus comentarios y su buena onda, por eso hoy le dejamos el tercer capitulo como lo prometimos, aunque la meta no la ayamos podido cumplir, estamos mas que felices con el resultado.
.
.
CAPÍTULO
3
Llegué
a mi apartamento cansado, necesitando un baño, una cerveza y comida. Esto de
ser un dios no era lo más genial del universo como algunos creían. Yo era
perfectamente feliz sin el drama de las flechas. Me dejé caer en el sofá y
pateé fuera mis zapatos. Abrí mis pantalones y acaricie mi pene pensando en
jugar un ratito conmigo mismo.
Entonces
el universo nuevamente conspiró contra mí. Mi teléfono que parecía muerto
empezó a sonar. Al mirar la pantalla veo el teléfono de Keith, mi prospecto de
novio.
—Hola.
—contesté
—Hola
hermoso – me dijo Keith — ¿Tienes planes para hoy?
—No
realmente. ¿Qué tienes en mente?
—Ya
que la última vez que salimos sólo tomamos café, ¿Qué te parece si te invito a
desayunar? – dijo él, usando ese tono sexy que hacía que mis rodillas
temblaran.
—
¿Desayuno?
—Seguro.
Vamos a bailar hasta que salga el sol.
—De
acuerdo.
—Bien.
Paso por ti en una hora.
—Te
espero.
Tan
pronto la llamada acabó, el cansancio abandonó mi cuerpo. Corrí al baño y me
duché concienzudamente. Keith era un hombre guapísimo, ya habíamos salido por
unos meses, aunque aún no teníamos sexo y no por que no quisiéramos. Más bien
porque este universo incomprensible quería que me muriera virgen. La última vez
que lo intentamos estábamos en su casa. Ya no teníamos ropa y Keith fue por el
lubricante, íbamos a empezar cuando su madre llegó al apartamento. Fue sumamente
vergonzoso. Ahí estaba yo, todo extendido, casi con un dedo en mi culo y mi
futura “suegra” llamando desde la sala a Keith. Nos vestimos tan rápido que
casi nos hacemos daño. Y para completar mi vergüenza mi ropa interior estaba en
la mesa del salón.
Salí
de ahí corriendo. Keith me aseguró que su madre no solía hacer apariciones en
su apartamento constantemente y que no me preocupara, que no era la primera vez
que ella lo encontraba con un amante. Eso en vez de tranquilizarme me
enfureció. Entonces Keith me besó y me dijo “ellos no cuentan es contigo con
quien ahora quiero estar”.
No
intentamos tener sexo en unas semanas. Hasta esta noche.
Abrí
mi cajón de la ropa interior y busque que ponerme. Había algunas cosas
realmente descaradas que había comprado con el paso de los años, y la esperanza
de una vida sexual activa.
Tomé
tres piezas del montón: un sencillo y típico slip blanco, un bóxer negro con la
parte superior hecha de malla y un suspensorio.
Miré
el suspensorio y recordé cuando lo compré. Estaba en mi último año en la
universidad y conocí a Randy Oliveira en mi clase de “Temas en el Cine”. Ya
saben, una de esas clases tontas que tomamos para mantener el promedio mientras
nos concentramos en las clases importantes. Randy jugaba al rugby, así que se
imaginarán el tipo de hombre que era. Aún recuerdo que para mí lo más
atractivo, era su nariz torcida causada por una aparente fractura.
El
primer día se sentó detrás de mí sin decir ni una palabra. Yo podía sentir su
intensa mirada sobre mi nuca, y por un momento me asustó la perspectiva de ser
atacado por un grande y fuerte jugador de rugby. Con el pasar de los días me di
cuenta que el si quería hacerme daño, pero de manera divertida.
Un día
a la salida de clases me preguntó si quería salir con él ese fin de semana.
Dijo que unos amigos estaban planificando un partido y que me vería muy bonito
sentado en las gradas apoyándolo. Descubrí rápidamente
que era abiertamente homosexual y aquel que osara meterse con él, pagaba con
sangre.
Las
cosas progresaron satisfactoriamente para ambos y para el final del semestre
planeamos tener nuestra gran noche. Yo compré el suspensorio para sorprenderlo.
A mi parecer realmente me hacía ver fabuloso, además las tiras de elástico
levantaban mi trasero, haciéndolo resaltar.
Sin
demora, entramos en su habitación, tuvimos nuestra dosis de carisias y besos.
Randy se estiró para tomar la botella de lubricante y la abrió con premura,
causando que parte de su contenido se derramara en el suelo, y esto a su vez
provocó que la botella se le resbalara de las manos.
Él a
toda prisa se levantó de la cama para recuperar la botella, con tal mala suerte
que resbaló por culpa del lubricante. Esto causó una aparatosa caída, un golpe
en la frente con la mesa de noche y una fea herida en la cabeza. Necesito 12
puntos de sutura junto con una noche en observación en el hospital del campus.
Decirles que la relación después de ese accidente estuvo en el ataúd no es
necesario.
Así
que descarté el suspensorio y opté por mi bóxer de malla. También tomé un par
de pantalones negros, una camiseta blanca y, para completar mi atuendo de
“Cómeme”, me puse mi chaqueta de cuero negra y botas de motociclista. Me miré
en el espejo y pensé “te ves elegante cariño” chascando mis dedos en señal de
aprobación. Inmediatamente quedé perplejo. Mi ropa fue remplazada por un traje
de pingüino, sombrero de copa y zapatos de charol. Parecía un muñequito de
pastel de bodas. Repito los poderes de un dios no son la última Coca-Cola en el
desierto.
Me
desvestí a toda prisa y volví a ponerme mi atuendo original. Pensando que esa
noche seria el rey. Y volví a chascar mis dedos, hábito que poseo desde que
tengo memoria. Entonces para mi consternación, terminé vestido igual que
Enrique VIII. Pero en el cuadro de Hans Holbein, no en la versión de Jonathan
Rhys-Meyers. Frustrado convoqué a mi abuelo. El aroma a algodón de azúcar era
calmante para mí. En mi subconsciente asociaba ese olor con bienestar.
El
abuelo tuvo un ataque de risa cuando vio mi vestimenta. Se rió tanto y tan
fuerte que olvidó ponerse ropa. Él se veía graciosos con su pelo rubio en risos
revueltos, un pañal de tela blanco, un caraj con flechas en la mano y el arco al
pecho. Entonces ambos nos reímos mutuamente de nuestros atuendos.
Cuando
al fin nos calmamos, mi abuelo se vistió con su regular indumentaria de cuero.
—A ver
cariño, ¿Por qué pareces un pervertido inglés del siglo XIV?
—Porque
pensé que parecía un rey todo sexy con mi otra ropa y de pronto aparecí con
estas…cortinas encima. ¿Me puedes decir que pasa?
—Cortinas
– mi abuelo infló las mejillas luchando fuertemente para no reírse. — Repite
todo paso a paso.
Me
lancé de lleno en contarle al abuelo todo. Él sabía de mi situación con Keith,
así que esa parte fue rápida. Al final de mi relato mi abuelo estaba rojo por
la falta de aire al tratar de no reírse.
—Cariño,
tu visión de la vida es lo que se refleja en los actos. Si piensas que un traje
de pingüino es elegante cuando conjuraste elegancia eso es lo que apareció. Lo
mismo pasa con la realeza.
—Que
bien – dije ya exasperado – necesito estar listo para Keith ya.
Y
volví a chascar los dedos. Decir que fue humillante el resultado fue poco. En
el instante siguiente estuve frente a mi abuelo usando solamente mi bóxer de
malla negro.
El
abuelo me miró perturbado y con una molesta risita, chascó sus dedos provocando
que en mi mano apareciera un tubo de lubricante y una rastra de condones.
—Parece
que los vas a necesitar – dijo y se sentó en el sofá.
—
¿Cómo detengo esto?
—Cariño
cada vez que quieras algo y truenes los dedos, el universo lo ve como una orden
para acatar tus deseos. Eso es porque estas usando tus poderes. Piensa en cómo
te quieres ver, intenta quedar como quieres.
—
¿Entonces si digo que soy sexy y hago esto…?
Chasqué
los dedos una vez más y lo siguiente que supe es que estaba en el sofá acostado
como David Beckham en el anuncio de Armani. Ya saben ese donde esta con el slip
blanco y la camisa abierta.
El
abuelo se rió tan fuerte que volvió a llorar.
—Inténtalo
otra vez por favor – dijo aun riendo.
Pensé
en la ropa que originalmente me puse y chasque los dedos como me dijo el abuelo
y zas ahí estaba yo listo para mi salida.
—
¿Siempre que chasquee los dedos va a pasar esto?
—No.
Es complicado. Sólo tienes que aprender a manejar tus nuevos poderes. – El
abuelo pareció triste por un minuto – Yo nunca quise esta responsabilidad para
ti.
—Tranquilo
– susurré para consolarlo – Zeus lo hizo porque soy caliente – guiñé un ojo.
Ambos
reímos. Después miré el reloj y me percaté que Keith tenía 10 minutos de
retraso. Era extraño en él, siempre fue muy puntual. El abuelo esperó conmigo,
pues aunque le había hablado de mi potencial novio, aun no sabía que aspecto
tenía. Esperamos otros 10 minutos, entonces empecé a desesperarme. Keith nunca
llegaba tarde. Nunca.
—Si
quieres podemos ver donde esta y comprobar si está bien – dijo el abuelo.
Lo
pensé un par de segundos antes de decir que sí. Mi instinto me decía que tenía que
saber dónde estaba mi futuro amante.
—Ahora
concéntrate en él. Busca su rastro en el universo.
—
¿Qué? – pregunté anonadado.
—Básicamente
vamos a abrir un portal que nos llevará a ver a tu novio esté donde esté. Él no
nos vera allí y físicamente no estaremos en el lugar. Vamos concéntrate en tu
novio, yo te sigo.
— ¿Y
por qué no lo haces tú y yo te sigo? – después de todo era el quien tenía eones
de experiencia.
El
abuelo me golpeó en la nuca, cosa que era muy molesta pero muy eficaz. Obedecía
al primer golpe. Me concentré en Keith hasta estar de pronto flotando en su
oficina.
—Estoy
mareado – dije cuando vi mis pies en el aire.
—Tranquilo
cariño – me tranquilizó el abuelo— Estás en el piso de tu apartamento. Respira
profundamente.
Lo
hice y en unos segundos el vértigo me abandonó.
—
¿Dónde estamos? – preguntó el abuelo.
—En la
oficina de Keith.
— ¿Y
dónde está? – volvió a preguntar.
—No lo
sé. Es mi primera vez en estos viajes, quizás me equivoqué.
Entonces
de lo que yo creía que era un armario, salió Keith arreglándose la ropa junto
con Orlando, su asistente, tras él.
—Voy
tarde – escuché que Keith decía.
—Tómalo
con calma él te estará esperando – contestó Orlando, vi como hizo un gesto de
fastidio antes de seguir hablando – Aun no entiendo por qué estas tras Max.
Demonios es lindo pero no para casarse. ¿Al menos has tenido sexo con él?
—No.
Pero lo remediaré pronto.
— ¿Y
pensaras en mi cuando se lo hagas?
—Eso
tenlo por seguro. Sólo estoy tras el por qué está forrado. Quizás no tenga
apellido pero tiene dinero. – Keith le dio un beso a Orlando y corrió a la
puerta – Te veo en tu casa esta noche.
— ¿Vas
a tener fuerzas? – disparó Orlando.
—Para
ti siempre.
Regresé
a mi departamento y me dejé caer en el sofá. Pensando si estaba soñando o
simplemente alguien se estaba burlando de mí. Sentí los brazos de mi abuelo
alrededor y sus besos en mi cabeza. Entonces supe que todo era verdad.
Keith
había hecho muchas preguntas sobre mi vida y mi familia. El llegó a la
conclusión de que era rico solo porque no debía dinero de mis estudios, tenía
mi propio apartamento auto y motocicleta. Dolía como una perra pensar que el
hombre que creí era mi pareja de vida, estaba más interesado en mi billetera
que mi trasero.
El
abuelo seguía abrazándome y diciendo palabras de consuelo entre sollozos.
Entonces entendí que quien sollozaba era yo.
—Príapo,
ven de inmediato – gritó mi abuelo.
Miré
sorprendido al abuelo y después al hombre que un segundo antes no estaba en mi
sala. El hombre era alto, bastante parecido al abuelo, a excepción que este
tenía una túnica blanca puesta y una erección gigante.
—Abuelo
– susurré – hubieras dejado que terminara sus negocios antes.
El
abuelo y Príapo se rieron fuertemente.
—No te
preocupes sobrino nieto…yo estoy en este estado constantemente.
—Oh –
dije eso tenía que doler.
— ¿A
que debo la llamada hermano mayor? – dijo Príapo
—Quiero
que el hombre que toque esa puerta tenga la jodida de su vida— dijo el abuelo
con un inusual brillo de maldad en sus ojos.
—
¿Hablas en serio? – preguntó Príapo.
—Sí –
contestó el abuelo – Toma su forma – me señaló con el dedo.
—Seguro.
Había
visto muchas cosas raras en los días desde que Zeus me hizo su jodida visita,
pero nunca pensé verme a mí mismo en otro lugar que no fuera un espejo.
—Carajo
– exclamé.
—Sin
lugar a duda – dijo mi otro yo…Príapo.
—Muy
bien – dijo el abuelo – Nosotros nos vamos mi muchacho necesita una noche de
diversión alocada.
—Saluda
a Medea por mí.
— ¿Qué
va a pasar? — pregunté mientras el abuelo tomaba mi brazo.
—Príapo
va a joder con Keith y él nunca se va a olvidar de ti. Por algo es el dios del
sexo. Bueno realmente es el dios de la fertilidad, pero como sin sexo no hay
fertilidad…
—No lo
entiendo, ¿él va a embarazara a Keith?
—No.
Sólo le va a dar el mejor sexo de su vida. Luego tú lo vas a dejar y cuando se
acueste con otro hombre nunca va quedar satisfecho. Siempre te va a anhelar.
Que mejor castigo que no tener lo que quiere.
Lo
próximo que supe es que estaba parado en una calle de lo que para mí sería la
antigua Grecia. Tenía puesto unos pantalones de cuero curtido, chaleco a juego
y una especie de botas atadas. Entonces lamenté que Hanes no hubiera existido
en esta época. Esta cosa picaba y mucho.
—Bienvenido
a Atlántida.
Holaaaaa! Acabo de leer este capitulo y debo decir que me encanta cupido, me encata la relación que tiene con su nieto y como lo cuida...eros... Megusta tu modo de pensar ;)
ResponderBorrarGracias por el capitulo ha estado genial cupido es lo mas y espero que su nieto este a la altura espero el siguiente capitulo de la historia, besos
ResponderBorrarQue buennnnn capi!!...me enamore de Cupido, un super abuelo....esperando otro,.muchas gracias!!!
ResponderBorrarMe encanto, me da pena que el novio de max no fuera trigo limpio, pero creo que priapo le va a dar lo suyo asi que tendra el castigo que se merece, muy bonita la relación de max con su abuelo. Gracias por el capi y esperando por más cuando puedas, besos
ResponderBorrarMe encaaaaaaaaaaanta, todo absolutamente todo, max es lindo y me encanta la forma de pensar del abuelo siiiii Príapo a darle duro y tupido al desgraciado, muchas muchas gracias por el capi y esperando con ansias enormes el otro, besos
ResponderBorrarjajajajajajajaja dioss que vengativo que es cupido me encanta!!!!!!!! a sido un capitulo buenisimo muchas gracias x subirlo aunque no llegara la meta de los comentarios sois las mejores!!!!!
ResponderBorraryo lamento no haber comentado antes pero tuve problemas con mi Internet, aun así gracias!! he leído todas sus historias y me han encantado.
ResponderBorrarHola :)
ResponderBorraryo nadamas vengo a hacer bulto jajaja...me espero hasta que este completa para leerla
Muchas gracias por el capi, bye :D
Hi!!!
ResponderBorrarSon las mejores..aunque no se pudo llegar a la meta propuesta , igual cumplieron su promesa...aun que no leo por capis, (que se sigan amontonando mas..XD)
gracias por el capitulo
Hola, yo no suelo leer por capitulos por varios motivos, pero quiero decirle que estoi al lado vuestro. Pero me dejaste con una duda, McGregor es el companiero de Teseo?
ResponderBorrarme ha encantado seguir asi que soy las mejores gracias por compartirlo con todas nosotras un abrazo muy fuerte
ResponderBorrarJajajaja,genial la venganza que han planeado para Keith,me he divertido con el capitulo aunque se me ha hecho muy corto,estoy deseando mas,gracias por compartir,besos
ResponderBorrarHOLA!!! RECIEN DESCUBRI ESTE BLOG Y ESTA ES LA 1er HISTORIA QUE LEO, Y ESTOY FACINADA CON ELLA, YA ESTOY ANCIOSA POR LEER LA CONTINUACION.
ResponderBorrarMuchas gracias por el capitulo y me gusta mucho la venganza propuesta por el abuelito.Besosss
ResponderBorrarse merecia ese cretino el castigo de priapo ya vera max que llegara el adecuado y cupido por favor ya parece su padre y lo es no son una linda y feliz familia la de ellos en cuanto los accidentes solo puedo deducir que no fue ningún accidente ... algún dios habrá intervenido
ResponderBorrarya quiero saber como continua ...
Felicidades!!!! grandes sorpresas como Priapo jajajjajajajaa.... que relacion tan genial de abuelo nieto..
ResponderBorraresperando el siguiente capi..
un fuerte abrazo
Hola gracias por el capítulo, espero con anclas el próximo
ResponderBorrarGracias por el capitulo es un libro genial.
ResponderBorrarOMG ya esta el nuevo capitulo shafshasjg
ResponderBorrarMe ire a bañar primero y despues disfrutare de este nuevo capitulo ^-^
Muchas gracias por compartirnoslo
Uff, cómo me he reido!
ResponderBorrarTocarse, falsas esperanzas, pasiva, erección, PRIAPO! (Si es como lo pintan en los mangas, me encanta ese dios; pero creo que no soportaría su consecuencia)
Jajaja, la culpa, sin dudas es del lubricante! Díganme que marca es, para no comprarlo nunca!!!
Excelente capítulo!!
gracias es un placer leerlas...<3
ResponderBorrar